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La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) ha declarado Patrimonio de la Humanidad a la arquitectura vernácula de México, reconociendo su valor cultural, histórico y ambiental. La decisión se tomó en la 47ª sesión del Comité del Patrimonio Mundial, celebrada en París del 16 al 27 de agosto de 2023.

La arquitectura vernácula de México es el resultado de la adaptación de las comunidades locales a sus condiciones geográficas, climáticas y culturales, utilizando los recursos naturales disponibles y las técnicas constructivas tradicionales. Entre sus características se encuentran el uso del adobe, la madera, el bambú, la piedra y el metal, así como la integración de elementos como el agua, la luz, el color y el paisaje.

La candidatura presentada por México incluyó un conjunto de 25 sitios representativos de la diversidad y riqueza de la arquitectura vernácula del país, distribuidos en 15 estados. Entre ellos se encuentran las casas mayas de Yucatán, las cabañas alpinas de Chihuahua, las viviendas rurales de Oaxaca, las casas sobre pilotes de Tabasco, las mezquitas de Chiapas y los palafitos de Nayarit.

La UNESCO destacó que la arquitectura vernácula de México es una expresión e identidad del patrimonio cultural del país, que refleja las diferentes formas de habitar y convivir con el entorno. Asimismo, resaltó que se trata de una arquitectura sustentable, que respeta el equilibrio ecológico y contribuye a mitigar los efectos del cambio climático.

Al recibir la distinción, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, agradeció a la UNESCO y dedicó el reconocimiento a los pueblos originarios y campesinos de México, que han conservado y transmitido su sabiduría arquitectónica a través de generaciones. También hizo un llamado a preservar y valorar la arquitectura vernácula como un legado vivo y una fuente de inspiración para el futuro.